Hablamos de reforma integral cuando quieres reformar toda tu vivienda íntegramente (carpinterías, cocina, baño, distribución, pavimentos, etc.), y suele hacerse cuando la vivienda está muy desgastada y necesita una renovación completa. En la reforma parcial, sin embargo, se modifica solo una parte de la vivienda (cocina y pavimento, por ejemplo, pero no toda la vivienda completamente), y suele hacerse cuando se quiere renovar una parte de la vivienda y conservar otra parte original.

Normalmente se suele tardar entre 2 y 4 meses, aunque depende de muchos factores: la superficie de la vivienda, su estado o el número de operaciones que deba incluir la reforma. ¿Es necesario reinstalar el circuito eléctrico o el de la calefacción? ¿Hay que tirar y/o levantar tabiques para cambiar la distribución de las habitaciones? ¿Reparar el techo? Todas estas cuestiones influyen en el tiempo que dure la reforma integral. 

Primero de todo trabajamos un proyecto para tener claras las actuaciones que se van a realizar, y este será la guía para los operarios que intervengan en la reforma. Al inicio de la obra, empezamos desalojando el mobiliario junto con los enseres personales de los propietarios y, a continuación, protegemos los elementos que no se sustituyan. A partir de ahí, se ejecutan los derribos de las zonas a retirar y, una vez limpia la vivienda, se inicia la redistribución de tabiquería e instalaciones. Luego, se va avanzando en los acabados y el montaje de elementos como carpinterías, mobiliario de cocina, baños u otros.

Depende del tipo de reforma que vayas a hacer en tu vivienda. Si en esa reforma se incluye alguna modificación de la estructura del edificio o se alteran elementos comunes, sí sería necesario. Sin embargo, aunque no sea imprescindible pedir permiso, sí hay que informar a la comunidad de que van a realizarse obras y de la duración de las mismas.

En una reforma integral puedes modificar todo lo que quieras, desde la distribución de los espacios de la vivienda hasta los materiales elegidos. De hecho, una reforma integral consiste precisamente en cambiar íntegramente la vivienda, así que todo está permitido siempre que se respete la legislación y la estructura del edificio. Por ejemplo, en Barcelona las reformas integrales suelen estar muy marcadas por el barrio donde se encuentra el piso, ya que cada uno tiene sus características propias. 

Depende de las licencias urbanísticas y del proyecto, aunque en general sí se puede. Será necesario un proceso burocrático bastante más largo. A grandes rasgos, consiste en lo siguiente: en primer lugar, hay que consultar los estatutos de la comunidad para ver si hay alguna normativa al respecto, y necesitaremos el permiso de la misma comunidad. También tendremos que consultar la normativa de habitabilidad de cada municipio, en este caso, Barcelona. Este proceso burocrático deberá concluirse después de la reforma a través de una notaría, que deberá informar al Catastro y al Registro de la Propiedad del cambio en la superficie de la vivienda. Pero no te preocupes, en Nexdom te ayudaremos durante todo el proceso.

Nuestros técnicos elaborarán un estudio de viabilidad para comprobar si es posible o no. Para saber si es posible quitar una pared, influyen diversos factores. El más importante es saber si se trata de una pared maestra, es decir, de una pared que sostiene la estructura del edificio. En líneas generales, los tabiques pueden quitarse sin problemas, mientras que las paredes maestras no, aunque en algunos casos es posible hacer modificaciones parciales y dejar unas columnas, por ejemplo.

Estructuralmente puede que no sea posible, aunque estudiaremos el caso para determinar si es posible o no. Además, para este tipo de reforma necesitaremos pedir una licencia de obra mayor, porque estamos ampliando los metros de la vivienda. También deberán tenerse en cuenta los reglamentos y legislaciones relativos a las fachadas del municipio en el que se encuentre la vivienda. Por ejemplo, no es lo mismo realizar este tipo de reformas en Barcelona que en Madrid.

Depende de cada proyecto y del municipio, aunque el 90% de las veces no se puede hacer, ya que es complicado tanto desde el punto de vista burocrático como a nivel estructural. Es necesario pedir permiso tanto a la comunidad como al ayuntamiento, así como asegurarse de que la estructura del edificio soporte el peso que se le añadiría. Todo ello implica que, en la mayoría de ocasiones, no se puedan instalar. En cualquier caso, en Nexdom revisaremos tu caso concreto para ver si es posible.

Sí, te orientamos para saber cuál es la mejor opción para reformar y te damos un precio orientativo de lo que te costará la reforma. Solo tienes que ponerte en contacto con nosotros e informarnos acerca de las características de la vivienda que quieres comprar y de la reforma integral (en Barcelona ciudad o provincia) que quieres hacer.