Los clientes querían aprovechar el verano para renovar los baños y pintar el piso, poner parquet en algunas estancias e instalar aire condicionado. El diseño de los baños fue el más complicado, ya que los cuatro inquilinos aportaron diferentes ideas y fue necesario encontrar una solución que se adaptara a las ideas y necesidades de todos.
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Diseño del proyecto
Cristina Prat | Interiorista
El reto fue garantizar la alta calidad de los acabados, renovar las instalaciones de fontanería que no funcionaban bien y ganar en practicidad y facilidad de limpieza. Se hizo la reforma en agosto mientras los clientes estaban de vacaciones.