No, no tiene nada que ver con el sushi… Excepto por su procedencia. Te contamos todo lo que necesitas saber sobre esta nueva tendencia japonesa que se basa en parte de la filosofía nipona. El estilo wabi-sabi es un canto a la belleza de la imperfección, la naturaleza y el ciclo de la vida, y traerá a tu hogar esa sensación de paz que tanto necesitas.
¿Qué es el estilo wabi-sabi?
Es posible que en tu casa ya haya elementos propios del estilo wabi-sabi, que hace de la sencillez y la naturalidad su mejor baza. El objetivo de la decoración wabi-sabi es encontrar el equilibrio en un hogar en conjunción con la naturaleza y el paso del tiempo. Suena bien, ¿verdad? Pues conseguirlo es muy sencillo.
El estilo wabi-sabi celebra la imperfección y la autenticidad
Claves de en la decoración del estilo wabi-sabi
Colores neutros
La paleta de colores del estilo wabi-sabi está formada por colores neutros que se pueden encontrar en la naturaleza: el blanco, el gris, los colores topo y arena y los verdes más oliváceos. Son tonos que transmiten tranquilidad y que relajan, que ayudan a que el mobiliario y la decoración parezcan lo menos artificiales posible. Si no quieres renunciar a darle un toque de color a tu hogar, puedes decantarte por algún detalle en colores más vivos que recuerden a elementos del mundo exterior, como el azul turquesa del mar o un verde hierba.
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Materiales poco tratados
Una de las características del estilo wabi-sabi, como decíamos, es la búsqueda del equilibrio natural y la celebración del paso del tiempo. Por esta razón, los materiales que buscamos son sencillos y naturales, la piedra, la cerámica o la madera maciza.
Además, este estilo reivindica preciosos materiales como la madera envejecida y abraza las grietas de las paredes o las piezas de cerámica, celebrando las pequeñas imperfecciones. Integra la naturaleza en todos los materiales de la estancia: elige lavamanos y pilas de piedra, suelos de parqué y puertas de madera para conseguir el efecto completo.
Sencillez, calidez y minimalismo
La decoración wabi-sabi es sencilla y cálida. Su esencia son los propios materiales y colores que has elegido para diseñar tu hogar. Decora con piezas únicas de barro y cerámica y con algunas flores secas. Las paredes desnudas o casi desnudas te ayudarán a conseguir el efecto deseado. En lugar de decorar con muchos cuadros, decora con lámparas de mimbre y una alfombra sencilla de fibras naturales. En este estilo de decoración japonesa, menos siempre es más.
Si buscas una decoración que te haga cerrar los ojos y respirar hondo al llegar a casa, el wabi-sabi es el estilo perfecto para ti: transmite quietud, paz y silencio.
