Rosas pálidos, azules pacíficos, verdes relajados… Las paredes en color pastel se asocian a emociones tranquilas pero a la vez, pueden aportar frescura y energía a nuestra casa. Sin caer en el excesivo romanticismo, te proponemos algunos mix para que te sumes a esta tendencia.
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“Los colores pastel suelen tener connotaciones poéticas y románticas, pero me gusta darles un aire diferente combinándolos con formas geométricas y materiales fríos, como metales y fibras sintéticas”
-Heleen van Gent, responsable del Global Aesthetic Centre
Antes de empezar, recuerda que en entre post hablamos de cómo elegir los colores de las paredes.
4 ideas para las paredes en colores pastel
Azul serenity, ¿quién dijo frío?
Uno de los colores favoritos para aquellas habitaciones en las que necesitas concentrarte. Por ejemplo, los estudios o los despachos. Con el blanco tendrás más luminosidad y un aire más veraniego. Si crees que es frío y poco acogedor, añade tonos tonos tostados y beige en la decoración o apuesta por un degradado en la pared, jugando con turquesas, índigos y tonos petróleo.
Melocotón en el baño
Uno de los colores que más presencia ha tenido este verano y que se quedará con nosotros: el tono melocotón pálido, ideal para incluir en estancias pequeñas y aportar luminosidad. Introdúcelo en el baño para que contraste con materiales como el mármol, compensando así muy bien la dulzura del tono pastel.
Si te atreves con más y buscas un efecto más potente visualmente, prueba a contrastarlos con tonalidades como gris antracita, negro o azul añil
Verde menta en la cocina
Es uno de los colores pastel que nunca pasa de moda. Sereno y refrescante, combina con el blanco y los tonos madera a la perfección. Nos gusta en la cocina porque aporta calidez, especialmente con colores como el beige y mostaza. Además, como en la cocina solemos tener plantas, eso refuerza mucho más su efecto green. Pero no cierres puertas a ninguna opción. Si tu cocina se inspira en el look nórdico y tiene presencia de gris y negro, el verde menta también tiene cabida. Reserva una pared para que resalte entre las demás.
Ideal para interiores clásicos, retros o, incluso, rústicos, en los que hay toques con hierro, acabados envejecidos y objetos de otras épocas.
El rosa ya no es de princesas
En el 2016, el rosa cuarzo fue elegido el color del año según Pantone. Lo cierto es que desde hace tiempo, ya no se asocia a los espacios más femeninos sino a lo que transmite. Y es el que el rosa pastel, en su versión más soft es romántico y relajante. La propuesta perfecta para decorar las paredes de los dormitorios. Si quieres exprimir al máximo estas cualidades, crea un total look y pinta del mismo color los muebles del dormitorio.
Pinta la mitad de una pared en rosa y el resto, en blanco. Una mezcla hecha para ganar luminosidad y amplitud.
Por último, dos inspiraciones para jugar con las paredes en color pastel:
- Agrupa colores pastel de tonalidades parecidas en la misma pared, como si crearan distintas capas.
- Las tonalidades más dulces quedan mejor cuando se compensan con colores más sólidos como el gris plata y el azul marino oscuro.
Inspírate con más ideas para pintar tu salón en dos colores
No les tengas miedo. Si una de las tendencias del verano sigue entre nosotros, es porque tiene mucho que aportar en nuestras casas. Dulces sí pero nunca sosos o cursis. Por eso, solo se nos ocurre una forma de terminar este artículo… Home Sweet Home.
