El dormitorio de los más pequeños de la casa debe despertarles la creatividad, las ganas de jugar y aprender pero, al mismo tiempo, debe ser su lugar favorito para relajarse y tener dulces sueños. Parecen muchos requisitos, pero con las decisiones acertadas podemos conseguir la decoración de una habitación infantil donde se sientan cómodos y seguros.
¿Qué tener en cuenta para decorar una habitación infantil?
Tanto la zona de juego como la zona de estudio comparten espacio. ¿Cómo podemos separarlas? Para empezar, es importante saber que durante los primeros años, tendrá prioridad la primera. A partir de los cinco, habrá que dar prioridad a un rincón para hacer los deberes, leer o llevar a cabo otro tipo de actividades intelectuales. Un buen estímulo para que le guste estudiar es crear un espacio cómodo y agradable. Así pues, se recomienda contar con tres espacios diferenciados en la misma estancia: para jugar, para estudiar y para dormir. Para equiparlos correctamente, hay tres muebles que son imprescindibles:
- Una mesa: se aconseja que mida, como mínimo, 1,20 m de largo x 60 cm de ancho. Si tiene cajones, mejor.
- Una silla: con una altura proporcional a la de la mesa y un respaldo alto.
- Una estantería: así tendrá los libros ordenados y guardar otro tipo de detalles más personales.
La seguridad
En las habitaciones de bebés, no necesitas muchos muebles pero sí contar con una zona blanda. Una alfombra y varios cojines pueden conseguir este efecto. Evita las superficies duras. A medida que vayan creciendo, la decoración de una habitación infantil irá cambiando o, mejor dicho, adaptándose al niño. Lo que nunca puede ignorarse es la seguridad. Es fundamental que todas las puertas funcionen bien o que no haya elementos deslizantes. Así estarás tranquilo mientras estén jugando.
Su color favorito
Los niños son capaces de saber qué color les gusta más. A la hora de decidir la pintura para su habitación, podemos hablarlo con ellos. Aun así, hay algunos consejos a tener en cuenta:
- En la primera etapa, elige colores básicos y neutros. Los tonos más suaves favorecen el descanso de tu bebé. Las maderas claras son las más adecuadas para el mobiliario infantil. Si echas de menos los colores vivos, introdúcelos en los complementos y textiles.
- Entre los 2 y 5 años, los niños ya identifican acciones, así que podemos reinventar las paredes con murales.
- A partir de los 6 años: ya son muchos los cuentos que han leído y las historias que te habrán pedido antes de ir a dormir. En ese caso, puedes escoger murales más didácticos y creativos, para estimular su imaginación.
Con una base neutra en los muebles y paredes, se puede hacer que la habitación se adapte edad del niño.
Otro factor a tener en cuenta es que, al preguntar al pequeño de qué color quiere pintar su habitación, es posible que este nos plantee alguna opción poco deseable, como el negro, el azul oscuro o el naranja fosforito. Tú conoces a tu hijo mejor que nadie, así que sabrás si este es un riesgo más o menos probable. De todos modos, siempre es posible darle la independencia y la confianza de elegir el color de su habitación orientándolo hacia opciones que a ti te parezcan aceptables. Por ejemplo, puedes enseñarle unas muestras de color que tú hayas seleccionado previamente. De este modo, sentirá que elige él pero tú no tendrás ninguna sorpresa desagradable. Otra opción, si elige un color difícil para la decoración, es pintar únicamente una de las paredes y dejar las otras en blanco.
Las camas
¿Cómo deberían ser las camas para la decoración de una habitación infantil? A los hermanos les encantan las literas, pero pensando a largo plazo, es una de las opciones menos cómodas para hacer la cama. Lo cierto es que si hay poco espacio, son ideales pero, en ese caso, elige modelos convertibles, como las literas que se pueden desmontar, dividir en dos camas individuales y ponerlas separadas. Una alternativa que nunca falla son las camas nido, especialmente útiles porque son muy cómodas y porque con solo deslizar y levantar, ya tienen la cama preparada.
La cama nido es también una opción ideal aunque tu hijo sea hijo único, ya que estará siempre preparada para cuando venga algún amiguito o algún primo a dormir. Hay, además, algunos modelos de camas nido o de literas que son ideales para la separación de espacios que os planteábamos a continuación. Son modelos con una cama elevada, como una litera superior (siempre con las barreras necesarias para garantizar la seguridad del niño, por supuesto), y un espacio polivalente debajo. En circunstancias normales, funciona como zona de juegos, pero tiene un colchón que puede plegarse o retirarse para que haga las veces de cama si hay invitados. Además, el hecho de tener su propia cama para sus invitados ayudará al pequeño a sentirse más independiente y dueño de su propio espacio.
Elige un tema o un motivo
¿Qué es lo que más le gusta a tu hijo? El dormitorio es un espacio sagrado para todos, también para los más pequeños. Es el lugar donde descansamos, sí, pero también donde podemos ser nosotros mismos alejados de los ojos de los demás, nuestro lugar seguro y feliz. Es imprescindible que sea especial y única para él o ella. Una manera de lograrlo es elegir un motivo que le encante y utilizarlo como tema para encauzar toda la decoración. ¿Le gusta el espacio exterior? Podemos pintar una pared de color azul marino y decorarla con planetas, estrellas y cohetes, colgar un móvil de un cohete y que sobre la cama descanse una serpiente espacial de peluche en lugar de un osito. ¿Le gustan los animales? En este caso, lo tendremos aún más fácil, ya que hay incontables productos, ya sean muebles, textiles, o cuadros, en los que los protagonistas son animales de todo tipo. ¡Échale imaginación!
La decoración de una habitación infantil debe cumplir 3 requisitos: Inspirarnos, tener todo lo necesario y estar ordenada.
La originalidad es cosa de niños
Ellos siempre nos dejan sin palabras con sus invenciones y sueños. Así que si hay una habitación de la casa que debe ser creativa, es la de ellos. Busca piezas diferentes y originales, como armarios que parezca las taquillas de los colegios, o un rincón de lectura con algunas bandas en la pared para apoyar los libros de frente y tener siempre a la vista, las portadas. Guarda los juguetes en cestos y coloca alguna pieza original para que se muevan un poco más, como unas anillas que cuelgan del techo. Recuerda que les encanta pintar así que una pequeña pizarra o un mural de corcho son ideales.
Pero si nos preguntas a nosotros, lo tenemos claro: sobre todo, no copies ideas ni intentes crear una habitación que hayas visto en algún lugar. Cuéntanos tus ideas y te ayudaremos a llevar a cabo la decoración de una habitación infantil. ¿La clave? Conseguir un dormitorio único. Al fin y al cabo, tu hijo es único y se lo merece.